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Taba pensando, me olvide de comentar, ayer estuve tirado en la cama todo el dia, estaba hecho pelota por el derivado del opio que estoy tomando para aliviar el dolor que genera el calculo squater que desde hace días habita en mi riñón. De repente, despierto del sueño profundo y descubro llamados telefonicos perdidos de fernando, mariano, migue, lorena y algunos otros desconocidos...como es?...O no llama nadie o llaman todos?...pero buhe, gracias igual. A ver si se ponen media pila y me llaman mas seguido o al menos un día cada uno...repartan las dosis de afecto...sino voy a falsear que tengo que drogarme con opio para que me llamen....ganas no me faltan (de que me llamen...tambien)

Pelo que linda que estas lole

Hoy recibí este mensaje :“espero te sientas mejor, después hablamos , a la tarde estoy por Belgrano, podrías darme la dirección de la peluquería ya estoy con ganitas de cambio......muchos mimos.”...automáticamente te llame, te di la dirección y el teléfono de la peluquería. A leerlo, inmediatamente me sentí halagado, sabia que pensaste en mi, sabia que tu deseo se sostenía en el mío, sabia que tus antojos complacían mis gustos. Pequeños detalles que solo con mencionarlos se convierten en ridículos, pero bien vale la pena vivirlos. Bien vale la pena saber que te importo, saber que me tenes presente en aquellas cosas insignificantes, que solo al considerarlas se convierten en imprescindibles para sentirme bien, a gusto, querido, halagado.
Aquella tarde de domingo que pasamos en la cama hablamos sobre cortes de pelo y demases. Hoy aquel comentario que tire al aire, mientras acariciaba tu pelo, se hacia un gusto cumplido gracias a tus arrebatos de cambio.Te llame a las 17:45, estabas comiendo un havana y tomando café con tu amiga en Belgrano. Tenias turno en la pelu a las 18:30...colgada, apúrate que no llegas!!!!!...si, llego (siempre cocorita)...a las 19:15 otro campaneo en mi celu y el siguiente mensaje “si sigo rejuveneciendo termino en guardería”...me rei, te llame de inmediato. Hablamos, reímos, y decidimos vernos, yo no aguantaba no verte, vos tampoco. Bajaste del 112 y te vi, estabas divina, espléndida, lo sabias y yo también. Paseamos juntos con la promesa de separarnos al llegar al final de la avenida, pero como siempre nos pasa, se nos pasa lo pasado y nos quedamos presentes en alguna esquina besándonos eternamente, soñando con futuras mañanas, tardes y noches de cama, mimos, palabras, pelis, papas fritas y besos.

filmus-ion

Hoy me levante luego de soñar profundamente, el opio pega, no es cuento.
Luego de querer enfocar el día descubrí que había perdido mis gafas en el sanatorio, ufa. Amos eso lentes, pero en fin, veremos si reaparecen, sino deberé reponerme a la perdida (ya me estoy acostumbrando a perder cosas y reponerme, pasa, todo pasa, nada queda, habrá que acostumbrarse).
Por la mañana seguí con las filmaciones. Seguimos a los vecinos en la radio, en la calle, en el bar junto a Filmus. En fin, tranqui, espero que haya salido lindo, la cosa va tomando forma, pero el guión sigue sin aparecer, necesitare mayor inspiración y mas tiempo real. Son muchas cosas en las que me comprometí y poco tiempo para agotar sus demandas, en fin, veremos...aunque sin lentes se complica aun mas.

significar el dolor

Hoy fue un día largo que comenzó con la promesa de ser agitado. Desfilaron múltiples obligaciones en sincronía con cada hora del día. El saldo parecía cerrase con saldo a favor de la satisfacción y el placer : Trabajo con pacientes, entrevistas, llamados nuevos pacientes y por ultimo filmar escenas para mi primer documental. Pero un dolor no calculado en la parte izquierda de la espalda comenzó a precipitar recuerdos no muy gratos. Si, si, ese maldito dolor no parecia otra cosa que una reversión de aquel que hace tiempo me hizo saber que nunca fui bueno para soportar el dolor. La molestia comenzó de a poco y termino siento insufrible. En mi agonía preferí ir al sanatorio que esperar una visita ambulatoria. Conclusión diagnostica, un nuevo calculo en la vejiga se presento con tanta evidencia que nuevamente preferí morir que revivirlo. Luego de chequear lo que suponía a través de mis recuerdos, comprobé que hay cálculos que no concluyen. Están ahí, duelen y aparecen de modo inesperado para recordarme que en la vida todo es pura cuenta.

Bien venida

Te doy la bienvenida...te debo la despedida como excusa para nuestro próximo encuentro.